Trató de cumplir a pesar del mal que la aqueja. La cuñada del presidente de la república, Jenifer Paredes, se presentó en la audiencia de apelación sobre la prisión preventiva por 30 meses que se le impuso.
No obstante, la diligencia no pudo llevarse a cabo tal y como estaba planeada, debido a que la mujer no se encontraba en las mejores condiciones de salud para participar.
Debido a este motivo de fuerza mayor, las autoridades tomaron la decisión de posponer la sesión para una fecha posterior, en la que la pariente del jefe de estado se encuentre en una posición en la que pueda ofrecer sus alegatos de modo correcto. la Segunda Sala Penal de Apelaciones reprogramó la evaluación del recurso para el 11 de octubre.
De acuerdo a la información brindada por la propia genifer paredes, el último domingo se iniciaron sus malestares y el lunes comenzó a recibir medicamentos vía intravenosa para apalear sus dolores.
Pese a que se encuentra recibiendo tratamiento, se ve en la necesidad de acudir al baño para arrojar de manera constante.
De otro lado, la apelación interpuesta por el alcalde de Anguía, José Nenil Medina, sí fue examinada a detalle por el colegiado.
Durante la audiencia remarcó que no es cajero de nadie, mucho menos del mandatario. Además, intentó justificar sus visitas a Palacio de Gobierno, alegando que para su trabajo como burgomaestre es necesario que acuda a las personas que dirigen el gobierno central a fin de conseguir ayuda para su jurisdicción.
Tras escuchar dichos argumentos, la Sala anunció que dará a conocer su fallo en el plazo de ley.