La presidenta de la República, Dina Boluarte, y otros funcionarios de su gobierno fueron denunciados ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional, institución con sede en La Haya y regida por el Estatuto de Roma, por las muertes ocurridas en las protestas sociales que iniciaron en diciembre del 2022.

Así lo dieron a conocer 16 políticos y juristas nacionales, entre ellos Marisol Pérez-Tello, Mirtha Vásquez, Diego García- Sayán, Harold Forsyth, Walter Albán, Indira Huilca Flores, Carlos Rivera Paz, entre otros.
En ese sentido, la expresidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, a través de la red social X, precisó que se presentó la denuncia «contra Dina Boluarte y su gobierno». «Estamos decididos a perseguir justicia ante las graves violaciones a los derechos humanos que se perpetraron», indicó.
Por su parte, la excongresista Indira Huilca sostuvo la querella es «por el asesinato de 49 personas y 344 heridos ocurridos entre diciembre 2022 y enero 2023». «Las graves violaciones a los DDHH de este régimen no pueden quedar impunes», arguyó.
Fundamentos
Según indicaron los denunciantes, la denuncia se interpuso tras haber «absuelto pausadamente todos los requerimientos legales, de acuerdo con las exigencias de la citada corte, y actuado con estricto apego al derecho internacional y a la legislación peruana».
En ese sentido, precisaron que tienen «la justa expectativa de que se abra una investigación y se llegue hasta las últimas consecuencias, incluyendo las medidas cautelares a que haya lugar».
«Fundamentan nuestra denuncia categóricos informes de países y de organismos internacionales incluyendo Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea, Australia, Nueva Zelanda, la ONU, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Human Rights Watch y Amnistía Internacional», indicaron.
Además, señalaron que el país atraviesa «una de las etapas más críticas de nuestra historia, caracterizada por una severa afectación de los principios de la democracia representativa y muy graves violaciones de los derechos humanos que no pueden, no deben, quedar en la más absoluta impunidad».