
Temen perder sus terrenos mientras esperan respuesta de autoridades.
Los damnificados por el dantesco incendio en Pamplona Alta duermen en carpas mientras reclaman ayuda oficial, enfrentando noches gélidas con insuficiente protección y el temor constante de que personas ajenas ocupen sus terrenos. Familias completas, incluyendo niños pequeños y una madre con su bebé de tres meses, permanecen entre los escombros custodiando sus propiedades, ya que muchas no recibieron carpas de la municipalidad por no tener infantes en brazos.
Mientras la comunidad organiza donaciones de víveres, los afectados exigen definición sobre su reubicación o permanencia en la zona, pues algunos habitaban el lugar desde hace más de trece años y ahora deben comenzar desde cero. Padres de familia han perdido jornadas laborales cruciales, como un vigilante que se ausentó tres días para proteger su terreno, profundizando la crisis económica familiar.
FUENTE : ATV